A la amnistía en cohete

Quizá bastase oír a Yolanda Díaz exaltando la fraternidad con el pueblo palestin o poco después de que su brazo terrorista acabara de sembrar Israel de cadáveres, con violaciones escalofriantes, para intuir con qué nivel de escrúpulos podría acudir ayer a Barcelona a convertirse en profetisa de la amnistía. Confiar en que Yolanda Díaz dudase en nombre del Estado de derecho o siquiera del principio de igualdad es como confiar que a Donald Trump le pare los pies un ataque de respeto por las instituciones. No va a pasar. Ya se vio tras la visita de ella al líder prófugo del 1-O en el santuario de Bélgica, sin entender siquiera que algo no encajaba en la imagen de una vicepresidenta… Ver Más



Más información